EPISODIO #004. CONFESIONES DE MENTES CREATIVAS: LOS ERRORES QUE HE COMETIDO EN MI NEGOCIO (+ JULI COSUNDINO)

  • Como dueños de negocios creativos, entendemos que el éxito no siempre es un camino recto. Y a través de nuestros errores, ganamos sabiduría, resiliencia y la capacidad de tomar decisiones para proyectar y crecer.

    Hoy compartiremos las lecciones que hemos aprendido de los pasos en falso que hemos tomado a lo largo de nuestros recorridos. Y para eso inauguramos una nueva sección de entrevistas a la que llamaremos Confesiones de Mentes Creativas.

  • Julieta Cosundino es diseñadora y fundadora de la agencia JuliCo Agency, especializada en marketing, branding y diseño web. Actualmente lidera un equipo de nueve mujeres dentro de su agencia y trabaja con propietarias de negocios en todo el mundo que están buscando crecer y expandirse.

    INSTAGRAM | WEB | PODCAST

  • 00:57 | Elegir vivir del diseño
    - Por qué el diseño
    - El miedo a cometer errores

    04:43 | Grandes errores
    - El mayor error
    - La relación con el fracaso

    10:03 | En busca del cliente ideal
    - Proyectos no alineados
    - Elegir con quien trabajar

    12:57 | La importancia de los límites
    - Herramientas para poner límites
    - Definir una estructura
    - Flexibilidad y no negociables

    18:49 | El desafío financiero
    - Errores financieros
    - Pasión vs. Rentabilidad
    - Controlar y medir
    - Poner precio a los servicios
    - Cobrar poco
    - El valor del diseño
    - Referencias

    30:49 | Lo que queremos hacer (y lo que no)
    - Armar una oferta de servicios
    - Oferta y demanda
    - Hacer lo que nos gusta
    - Eliminar servicios
    - Formar un equipo de trabajo

    37:37 | Cometer errores a conciencia
    - Previsión de errores
    - El rol de la intuición
    - Proyectos sin terminar
    - La comunicación con el cliente

    42:29 | Orgullosas de cometer errores
    - Frenar a tiempo
    - Blanquear los errores

    45:17 | Los errores y el aprendizaje
    - Lo que me hubiese gustado saber
    - El trabajo de administrar una empresa
    - Los aprendizajes más grandes

    50:30 | Diseñar en comunidad
    - Espacios para compartir
    - Hacer equipo
    - Compartir experiencias

TRANSCRIPCIÓN

00:57 | Elegir vivir del diseño

[Flor]
Invitamos hoy a Juli para hablar de este tema puntual porque Juli no se guarda nada y comparte mucho sobre sus experiencias, sus errores y aciertos. Además, Juli fue la primera en decir que sí a nuestro evento del año pasado. Así que nos pareció que era la persona ideal para abrir esta nueva sección.

[Anto]
Juli, bienvenida. ¿Cómo estás?

[Juli]
Buenas, chicas. ¿Cómo andan? Muchas gracias por la invitación nuevamente.

[Anto]
Antes que nada para que todos nos conozcamos un poco: ¿Por qué JuliCo y por qué el diseño?

[Juli]
Bueno, en realidad, con respecto al nombre, no tengo mucho. No hay un nacimiento muy específico con respecto a eso. Es simplemente la unión de mi nombre y mi apellido, y fue algo que se le ocurrió mi novio en ese momento. Me dijo: "Podés juntar tu nombre y tu apellido", buscamos a ver si había algo similar, vimos que no, y dijimos "bueno, listo". No lo pensé mucho, sinceramente. Surgió de esa manera.

Y después con respecto a lo que es diseño, siempre me interesó el mundo del diseño, si, bien esto es algo que también lo digo mucho en mis redes: yo no soy diseñadora gráfica recibida. Soy autodidacta, de corazón, digamos, y es algo que siempre me gustó. Aprendí por mi cuenta cuando era adolescente. En ese momento se usaba (miren de los años que les estoy hablando) Paint Shop Pro. No sé si lo escucharon alguna vez. En esa época estaba Photoshop, pero la versión 1 o 2, y Paint Shop Pro, y eran esos los programas que se usaban, y aprendí por mi cuenta. Y la realidad es que cuando me tuve que decidir por una carrera universitaria no sabía que existía Diseño Gráfico. Venía de un pueblo muy chiquito, no tenía conocimiento. Obviamente existía la carrera pero yo no lo sabía. Y creo que si los hubiese sabido capaz hoy tendría un título de eso. Pero básicamente fue así, cuando vino la pandemia, decidí retomar, si se quiere, esa pasión por el diseño que siempre la tuve.

[Flor]
Y bueno, ya que fue un comienzo así, como que no tuviste tanta de esa preparación, por ahí, académica y demás, cuando decidiste empezar con la agencia, ¿tenías miedo de cometer errores? ¿Que era lo que se te pasaba por la cabeza?

[Juli]
Sí, miedo hasta el día de hoy. Creo que eso algo que no se va nunca aparte, el hecho de tener miedo, cometer errores. Creo que va cambiando el miedo, va variando a otro tipo de miedo, pero no se va nunca.

Cuando arranqué, en realidad era un estudio unipersonal, un mini estudio gráfico que era yo sola. Y al principio no tenía mucha visión de crecimiento de, por ejemplo, la estructura que estamos teniendo hoy en día. Estaba cómoda, de hecho, con esa estructura de ser yo sola, porque trabajaba con cuatro o cinco clientes al mes, era algo que podía manejar, algo razonable. Pero bueno, se empezó a desbordar desde que empezaron a llegar un poco más de clientes. Y bueno, empecé a poner un poco más de límites porque hubo ahí un desborde, pero eran todas cosas que yo iba cometiendo el error y aprendiendo, anotando y ajustando. O sea, era un camino como de aprendizaje de mí misma, y también de obviamente hablar con colegas, contarles un poco la experiencia que estaba teniendo y que ellas me ayudaran o me guiaran un poco porque era un mundo total y completamente nuevo para mí, porque no tenía una referente, no tenía compañeras, no tenía amigas que se dedicaran a eso. Entonces. Era como todo en soledad, era darme la cabeza contra la pared en soledad, pero bueno, hacerlo y anotar el error, ajustarlo y volver a arrancar.


04:43 | Grandes errores

[Anto]

¿Te acordás del mayor error que hayas tenido hasta el momento?

[Juli]
Sí, si, sí. Me acuerdo.

Fue particularmente con una página web, porque creo que, además, es un servicio que es bastante más extenso por el tema de tipo de trabajo, por los materiales que hay que pedirle al cliente, por lo que hay que entregar, la metodología, ustedes deben saber. Y obviamente fue mi error por esta cuestión de no haber puesto límites en su momento, no haber trabajado con un contrato que me protegiera a mí y al proceso de trabajo lo suficiente. Entonces se desbordó.

Un proyecto que debería haber durado, por ejemplo, dos meses, supongamos, terminó durando más de medio año con el consecuente dolor de cabeza que eso implica y la pérdida económica que eso implica porque, además, bueno, yo estoy en Argentina y cobramos en pesos. Y no es lo mismo recibir el dinero un determinado mes que seis, siete meses después.

Entonces, ahí me di cuenta de que el error más grande era no tener un proceso superdefinido o un documento, un contrato, que a mí me respaldara, me protegiera para esas situaciones.

[Flor]
Ese creo que es uno de los errores que cometemos todos. Me acuerdo al principio, que con Anto comentábamos que estábamos agregando más términos y condiciones a los documentos que les entregamos antes, y al final, nos quedaba un documento larguísimo con un montón de cosas y como que nos íbamos consultando: "y ahora agregué esto", "y ahora agregué lo otro", pero creo que es algo de lo que todos pecamos al principio y después cuando tenés un contrato te relaja un montón porque estás como resguardado, te resguardás a vos y resguardás también el cliente, porque es algo para las dos partes. No es que tiene algún impacto negativo en el cliente. Pero bueno, ¿Cómo es tu relación con esto, con los fracasos en general?

[Juli]
Trato de aprender un poco de todo eso. La realidad es que tengo mi manera de manejarlo, de procesarlo, que es parar. Parar porque es algo que siento que a veces me supera. Entonces, lo mejor que puedo hacer es frenar y tomar notas después de eso.

Tuve hace poco, fines del año pasado, del 2022, un burnout muy grande, justamente también por esto. Si bien ya venía puliendo mucho lo que es proceso y contrato y demás, me vi superada por la cantidad de proyectos, de clientes, se extendieron indefectiblemente, y tuve un burnout muy grande. Y lo único que pude hacer, por una cuestión hasta de salud mental, fue frenar. Entonces, hoy en día, cuando yo ya siento que estoy en esa cuestión de verme superada, yo ya me conozco y digo: "Bueno, es momento de poner un freno de mano", y hago eso. Ahora, por suerte, hay un equipo que me respalda pero trato de escucharme un poco más, de decir: "Hasta que llegaste, tomate unos días", y después volvelo a consultar, porque creo que es lo mejor. Y siempre digo esto, nosotros no somos médicos, nadie se va a morir si se demora un poco más la entrega del logo o la página web, entonces es importante también escucharnos y lo que nos va pasando.

[Anto]
Valiente eres, porque parece muy fácil decirlo así como lo estás contando, pero después tomar la decisión es un paso enorme. Así que, ¡felicitaciones! No sé cómo decirlo pero me parece el mensaje super lindo, y resaltar que no es fácil, no es fácil, pero también cambiar la mente para decir: "nadie se va a morir" y podemos buscar otras alternativas. Y como vos decís, ver si lo que necesito es un equipo o lo que necesito es frenar un tiempo, decir que no, y si no podemos económicamente, quedarnos con uno o dos clientes, hacer ajustes. Ver qué necesito y a partir de eso accionar.

[Juli]
Exacto. Creo que se trata un poco de eso también.

Obviamente, no es sencillo hacerlo. A mí me costó mucho. Tuve que parar más de un mes con la pérdida económica que eso significa también, porque, si bien tengo un equipo, hay muchos de los servicios que sigo brindando yo, y muchos proyectos que todavía los tenía asignados yo. Entonces, tampoco los podía derivar o delegar en el estado en el que esos proyectos estaban, porque ya estaban muy avanzados. Y tuve que parar, y en algunos casos, perdí dinero, rentabilidad del negocio, pero es hacer un balance de lo que conviene o no conviene en ese momento o lo que en realidad a uno le va a hacer mejor o peor. Y creo que es eso. Eso fue lo que pensé en ese momento.

[Flor]
Sí, tal vez también no está la posibilidad de que vos lo sigas trabajando en ese momento. O sea, el mes, tal vez lo ibas a perder igual. Y lo mejor es poner el freno en el momento y quedarte tranquila de que están todos avisados y que son cosas que pueden pasar, está bueno reconocerlo también, y poder poner ese freno.


10:03 | En busca del cliente ideal

[Anto]
Mencionabas esto del diseño web, como mayor error justo mencionaste haber tomado una página web o esto que te pasó antes, de tener muchos clientes y sentir como que colapsaste. ¿Hubo alguna vez un determinado proyecto, un determinado cliente, que sentiste que tomaste pero que no estaba alineado con tu forma de trabajo o con el público al que te dirigís?

[Juli]
Sí, me pasó muchas veces y hasta no hace mucho, les digo. Obviamente, es un proceso el hecho de refinar bien el mensaje, el tipo de cliente con el que uno quiere trabajar pero sí, me pasó de quizás tomar un cliente por una situación económica porque decía: "bueno, estamos en temporada baja y hay que tomar este cliente sí o sí", y no estaba alineado, quizás, porque no respetaba un poco el proceso o porque no le daba el valor que realmente tenía, a pesar de tener el dinero para invertir en el servicio.

A veces no le dan el valor que realmente tiene. Y eso también, uno puede decir: "Si lo paga y se entrega todo en tiempo y forma, listo". Pero la realidad es que a mí me gusta que mis clientes comprendan en lo que están invirtiendo y que realmente entiendan que esto es algo que les va a servir y que los va a potenciar y que les va a servir para que se expandan. Pero sí me pasó de tomar clientes, ya sea por una cuestión, como les digo, económica o por una cuestión de que, por ejemplo, no estaba alineado al rubro con el cual yo quería trabajar. Eso me costó varias veces.

[Anto]
A mí me pasa que cuando tengo estos clientes, es como el punto para subir el siguiente escalón. Como que estoy en una forma de trabajo y de repente tengo ese cliente que es como, okey, no. Entonces por acá no era, o tengo que ajustar esto y como que siento que me lleva el siguiente paso de trabajo.

[Juli]
Sí, de hecho, es como que vas viendo. Te sirve. Yo creo que todo es aprendizaje y no lo digo en el sentido de que puede ser algo cliché o que quede lindo, es que realmente todo es aprendizaje. Todo sirve. Inclusive ese cliente con el cual no te sentiste tan alineada. A veces nos sirve para validar o para pulir un poco más el proceso. Entonces, creo que todo funciona. Y obviamente si fue una ganancia económica, también desde ese lado es ganancia, más allá de que no haya estado tan alineado.

Hoy en día creo que no elijo trabajar con personas con las cuales no me siento bien o que creo que realmente no lo vamos a poder ayudar o no le va a sacar el provecho realmente al servicio. Pero en ese momento, sí, elegí muchos clientes con los cuales no me alineaba.


12:57 | La importancia de los límites

[Flor]
¿Y qué herramientas utilizás? ¿Cómo hacés para poner límites? ¿Qué tipo de límites son tus no negociables o cómo lo vas manejando con cada cliente? Porque si bien tenemos esos límites que decimos: "esto es igual para todos", hay algunos que los vamos ajustando también con cada cliente. Entonces, está bueno hablar de cómo haces para poner esos límites y determinar cuáles funcionan para vos y cómo los aplicas a tu metodología de trabajo y a la comunicación con el cliente.

[Juli]
Bueno, en mi caso, muchos diseñadores también utilizan lo mismo que es el tema de los contratos. Recientemente los hice revisar con mi hermana, que es abogada y los volvió a rehacer a todos. Incluimos algunas cláusulas, inclusive con respecto a un tema judicial, porque el año pasado tuve una persona con la cual casi llegué a una instancia judicial.

Por suerte, no llegué, pero casi. Y me vi en la situación de que mi contrato, al ser un contrato, vamos a decir, entre privados, no me respaldaba si yo llegaba a una instancia judicial con ese cliente, entonces lo hice revisar con mi hermana, que es abogada y ahora está un poco más preparado, que de hecho es algo que recomiendo súper que lo puedan hacer ver con algún abogado para que después si -obviamente uno no quiere- pero si se llega una instancia judicial que ese contrato tenga valor.

Y esa es mi metodología hoy en día, y la otra es tener un proceso superestructurado. Yo no soy estructurada en mi vida para nada pero mi proceso lo defiendo con uñas y dientes porque realmente es lo que, primero, le va a sacar todo el valor al proyecto, y segundo, nos va a situar tanto al cliente como la persona de la agencia que está realizando ese proyecto en que vaya en tiempo y forma y que se entregue todo lo que se tiene que entregar. Me parece que es la manera más responsable de poder brindar un servicio.

Entonces, hoy en día tenemos un proceso ya superestructurado que se lo comunicamos al cliente desde el primer momento. Se le dice qué persona va a estar a cargo en el proyecto y se le comunica todo el proceso. De hecho, tenemos una reunión donde le mostramos todo lo que es el proceso. O sea, no es una reunión de comienzo de servicios, sino que es una reunión donde le mostramos todo el proceso y todas las etapas, y todas las tareas que el cliente tiene que ir realizando paso a paso. Es una manera de involucrarlo y de darle a entender bien todo lo que va a ser el desarrollo del proyecto.

[Flor]
Y viste que siempre tenemos ese cliente que quiere negociar, en precio, en tiempo, en lo que se te ocurra. ¿En qué cosas decís: "sí, bueno, esto lo puedo adaptar al cliente"? ¿Y en qué cosas te ponés más firme? Porque sé que hay mucha gente a la que le puede pasar esto, como que el cliente empieza a dominar la situación. Entonces está bueno saber hasta dónde sí y hasta dónde no. Si bien tenemos procesos que son rigurosos, a veces hay ciertas flexibilidades. Entonces, ¿ Cómo lo manejas eso?

[Juli]
Y eso va a depender del tipo de proyecto y el tipo de cliente también. Me ha pasado, quizá si es un cliente que ha contratado varios servicios, nos ha solicitado algún descuento. De hecho, tenemos una política en el segundo servicio, de hacer un pequeño descuento a modo de incentivo.

Eso, digamos, es charlable, depende de la situación. Depende también de lo que sea el servicio, ¿no? Depende de lo que se vaya a contratar. Eso creo que se puede hablar. También el tema de la financiación. Como estamos acá, en Argentina, nosotras a veces tenemos cierta flexibilidad con el tema de los pagos, no a nivel de hacer un descuento pero si quizás incrementar o dividir la cantidad de pagos. Eso es charlable.

Lo que creo que no negociable es, supongamos, la cantidad de ajustes, que en eso estoy bastante estricta por una cuestión de que si yo se lo perdono a uno, se lo te perdonar al resto también. O sea, no puedo cobrarle un ajuste extra a un cliente y a otro no cobrárselo. Me parece que sería injusto para el resto que también está en paralelo haciendo su proyecto. No me parece algo que sea razonable, entonces en eso no soy flexible. Esos son mis no negociables, respetar el contrato como está.

Pero después, por ejemplo, tema de reuniones y el cliente, tenemos una instancia dentro del proyecto de Branding que no es con reunión, que es con video, o sea, se le manda la presentación y el video explicativo y no requiere reunión, pero el cliente necesita la reunión porque es muy específico el feedback que quiere dar, bueno, tenemos la reunión, podemos ir viéndolo en ese sentido. Hay cierta flexibilidad. Obviamente, en lo que no hay flexibilidad es, por ejemplo, saltear etapas del proceso o como les decía lo de los ajustes, la cantidad de ajustes. Eso claramente no es un no negociable.

[Anto]
Sí, muy bien. Creo que lo más fácil, digamos, a mí me resultó para poner límites es como vos mencionadas antes, tener un proceso y presentárselo al cliente para que sepa todo, cómo nos vamos a manejar. Entonces, después, ya está informado de todo lo que podemos, y si está corriendo algún límite, quiere pasar algún límite sobre algo que ya le informamos, es mucho más fácil, por lo menos para mí, decirle "no, ya vimos esto, ya te lo mencioné".


18:49 | El desafío financiero

[Anto]
Y ligado justamente a esto de límites, parece que no, pero para mí está muy ligado el tema financiero, porque nuestra materia prima o nuestro material es el tiempo, la capacidad, la creatividad, nuestro conocimiento. Todo eso es lo que brindamos, entonces es lo que tenemos que manejar financieramente. Hablando financieramente, ¿Cometiste algún error financiero o cómo te administraste con las finanzas?

[Juli]
Errores financieros, muchos, sobre todo el hecho de que, a los diseñadores nos encanta comprar tipografías y recursos y esas cosas y como que, al menos en mi caso, yo no mido. Si algo me gusta, voy, lo compro. Así que en ese sentido, no tengo mucho filtro.

Después, en el tema de lo que son las finanzas, al principio me costó un poco esquematizar el negocio. Era como que recibía los pagos de los clientes, más o menos lo iba anotando, pero con todo muy rudimentario. Me costó un par de meses decir: bueno, hay que hacer una estructura de un negocio", o sea, controlar los ingresos, controlar los costos, que creo que lo hice cuando empecé con la contadora, que también me dio una cierta estructura. Pero hasta ese momento era todo muy ligero, lo anotaba así no más. Hasta que me di cuenta que tenía que tener cierto control, inclusive para saber si a algún cliente le faltaba algún pago o cuándo era que había hecho ese pago. Entonces, ese tipo de cosas, de información que tenemos que estar chequeando y controlando día a día. Después, me parece que lo más importante para no cometer errores financieros, obviamente, es el control, el poder medir en qué se te va el dinero y el hecho de ver si en lo que vamos a invertir realmente lo necesitamos.

Me pasó el año pasado que quería invertir, por ejemplo, en un curso que valía más de 1000 dólares. Yo ya estaba decidida, con la tarjeta en la mano a punto de poner "comprar", y la realidad es que me senté a analizar los números y dije: ¿Puedo, o sea, mi negocio tiene la rentabilidad en este momento para hacer una inversión de esa capacidad? Como poder pagarlo, lo podía pagar, pero iba a salir de mis finanzas personales, o sea, de mi sueldo, y no de la ganancia del negocio. Y la realidad es que si voy a invertir en una formación, me gustaría que sea el negocio el que lo pague y no yo misma, sobre todo si es algo que después lo puedo capitalizar en la agencia, no? Entonces, los números no daban para una inversión de esa índole. Y bueno, fue algo en lo que retrocedí, que finalmente no invertí.

Y también cuando nosotros hacemos una inversión, por ejemplo, en formación, tenemos que tener en cuenta si vamos a realmente ver una rentabilidad. No digo que sepamos que el mes que viene vamos a estar recuperando ese dinero, pero al menos tener un horizonte claro o estimativo de cuándo vamos a estar recibiendo esa ganancia o ese retorno de la inversión. Y en ese momento tenía muchos clientes de argentina, no tenía una estrategia orientada a tantos clientes del exterior. Entonces me pasaba que quizás esa inversión iba a tardar muchísimo tiempo en recuperarla. Y fue algo que me senté a meditar, pero mi yo de hace dos años atrás, lo hubiese comprado, sin dudas. Por eso es lo que digo de quizá empezar a meditar un poco más las cosas.

[Flor]
Sí, sí, sí. Tal cual. Y aparte, claro, pasa eso, ¿no? Creo que nuestra profesión está muy ligada a la pasión que tenemos por el diseño y demás. Entonces es como "Sí, me encantaría hacer este curso, lo voy a hacer", "sí, mira que hermosa esta tipografía" y "ahora quiero esto", "quiero lo otro", y no pensamos realmente si hago esta inversión, cómo va a impactar en mi negocio, si realmente necesito hacerla porque tiene que ver con los objetivos que yo quiero alcanzar y esto me va a ayudar. Un montón de cosas que deberíamos plantearnos antes de hacer ese tipo de gastos o de compras o inversiones, dependiendo en realidad, pensar si realmente va a ser una inversión o solamente es un gasto, ¿no?

¿Y te pasó esto de -que es la típica- cobrar poco? Entonces, empezaste cobrando poco y después no sabes cómo subir los precios, o sea, ¿Cómo te llevaste con esto de poner precio a a tu trabajo? ¿Y si cometiste algunos errores también en ese proceso?

[Juli]
Sí, me pasó de cobrar poco, sobre todo por ese síndrome del impostor que creo que tengo hasta el día de hoy de decir: "¿cómo voy a cobrar lo mismo que una colega que estudió, se recibió en diseño y yo voy a cobrar lo mismo?". Entonces, esa cuestión siempre me persiguió un poco hasta que me fui capacitando, fui trabajando con varios clientes, puliendo los procesos y demás, y como que se fue un poco apagando eso, pero siempre está esa cuestión de decir: "¿Por qué voy a cobrar lo mismo que una colega que estudió?".

Entonces, cuando empecé, cuando arranqué, cuando ingresé al mercado lo hice con un valor muy bajo, porque también mi tipo de público era lo que podía pagar. En ese momento tenía un público que quizás esté la misma que yo, recién empezando con su negocio, viendo a ver cómo va a hacer las cosas, necesitando un logo y quizás una paleta de colores, una identidad muy rudimentaria y era el tipo de perfil al que apuntaba. Por eso también mi ticket era bastante bajo, bastante económico.

Después, a medida que fui viendo que tenía muchos clientes -en ese momento seguía trabajando sola-, ahí dije: "es hora de incrementar un poco los precios". Yo creo que esa es la primera vara que tiene que tener un diseñador. Cuando ve que tiene mucha demanda, es hora de poder incrementar un poco los precios, y después -a ver, esto no es una ciencia exacta- pero si invertís en informarte, si invertís en capacitarte, si trabajas con herramientas en las cuales vos comprás y son herramientas que te permiten trabajar inclusive de manera más eficiente o más rápida, todo eso también se tiene que reflejar en el precio que uno cobra.

Entonces, no creo que esté mal arrancar con un ticket bajo. Siempre, igualmente, aconsejo que empiecen con un valor acorde al mercado, no más bajo de lo que está, porque lamentablemente es una profesión que todavía sigue siendo bastante bastardeada con respecto a los precios, y que es algo con lo que yo trato de luchar día a día, que eso cambie, de los colegas con los que hablo que ingresen con un precio razonable por más que se dediquen a un perfil bajo.

Pero mi primer error con respecto a los precios, creo que fue el hecho de no tener -volvemos al tema de no tener límites- como no tenía un proceso, no tenía estructura, los pagos obviamente también se demoraban. Entonces, era como que mi rentabilidad dependía de qué tan avanzado estuviera el proyecto o de que el cliente tuviese ganas básicamente de avanzar y de pagar. Y no puede ser así. El cliente no puede manejar la rentabilidad de tu negocio. Entonces, creo que ese es el mayor error que cometí en cuanto a lo que es precio.

[Anto]
Qué bueno que mencionaste eso, porque primero que mencionaste lo del título. ¿Alguna vez algún cliente te pidió un título universitario, que le muestres un título universitario? La verdad es que nuestra profesión es por conocimientos y además tampoco te podría defender porque después veo muchos diseñadores también con un título, egresados en la misma universidad que yo, y tampoco te podría defender. O sea, cuesta, como es tan subjetivo y es tan de la creatividad de cada uno, es muy difícil que esté ligada a un conocimiento, cuánto cobrar por un conocimiento, creo que va más por experiencia y por a quién te dirigís y todo eso más que por "esta persona tiene una licenciatura, esta persona tiene una tecnicatura y esta persona tiene un curso de nada más hecho". Es muy difícil evaluarlo.

[Juli]
De hecho, lo que yo creo, que empecé a emprender por ese mismo motivo. Porque si yo quería entrar a una empresa, me pedían un título y no podía entrar a trabajar en una empresa porque no tenía ni experiencia en diseño ni título. Entonces dije "Tengo que hacerlo por mi cuenta", que un cliente no me va a pedir un título, me a pedir un porfolio o me va a pedir una muestra de lo que sé hacer, no un título.

[Anto]
Sí. Y también estuvo bueno que mencionabas que está bien empezar con un ticket bajo porque también seguramente lo que estás ofreciendo es otra cosa.

A mí me pasó lo mismo. Yo cuando empecé, por más que yo tenía ya mi título, ya había trabajado en dos estudios de diseño, cuando empecé no era lo mismo estar sola solita frente al cliente que con mi jefe, con el de cuentas, con todo el equipo atrás. Y la verdad, no me sentía capaz como para cobrar ni siquiera lo que decía el tarifario online y al mismo tiempo, ahora que lo veo lejano, como seis años después, lo pienso y la verdad es que cobraba acorde, porque tampoco mi servicio era excelente. Estaba prueba y error con cada cliente y mis clientes que llegaban también necesitaban solo un logo para su perfil en Instagram, era eso lo que querían.

Y me acuerdo de leer muchos colegas con más años, enojados por los que cobraban poco, pero estábamos yendo a clientes totalmente diferentes y brindando servicios totalmente diferentes. Yo no estaba a la altura de ellos tampoco. Entonces si veo a alguien que cobra poco, entiendo que está comenzando, porque entiendo que no es una competencia, digamos, o sea, porque estamos yendo a públicos totalmente diferentes y brindando servicios totalmente diferentes y teniendo experiencias diferentes. Así que está bueno también aclarar un poco, porque, por lo menos cuando yo empecé, era la típica. No se decía cuánto cobrabas, tenías que tener título, y no cobres poco.

[Flor]
Bueno, pero ahora hay mucho más acceso a ese tipo de información. Por ahí antes, porque nosotras, cuando empezamos, fue hace un montón de tiempo, por lo menos yo hace más de 10 años que empecé con estos trabajos freelance y me pasaba que no sabía dónde fijarme y si estaba poniendo bien los precios y el tarifario te dice el ítem este, este, este, y si le agregaste otro… Yo no sabía qué sumarle o cuánto era el porcentaje. Eso pasa un montón.

Y si es verdad que a mí me pasan dos cosas. O sea, considero que es verdad, yo no siento que el que cobra 500 pesos un logo me está sacando trabajo porque considero que no, que es otro tipo de cliente, que ese cliente no es el que me va a contratar a mi.

Sí también está esto de poner en valor al diseño, que siento que también está bastante bastardeado, por decirlo de alguna manera. Entonces encontrar el equilibrio entre esas dos cosas es bastante, bastante difícil. Pero bueno, también pasa esto de que cada uno va definiendo sus servicios y se va armando su cartera y como que le va dando forma a su negocio y eventualmente crecerá la persona que tenga las condiciones para crecer y que esté brindando servicios acordes. Y siempre va a haber alguien que quiera pagar $500 por un logo, pero creo que no nos va a estar afectando a nosotras.


30:49 | Lo que queremos hacer (y lo que no)

[Flor]
Y hablando de esto de los servicios y demás. No sé si cuando armaste tu cartera de servicios, tuviste algunos errores al definir servicios, servicios que por ahí decías "¡Uh! ¿Por qué empecé a a brindar esto si al final no está alineado con lo que quiero?" o "Los clientes que me contratan por este servicio no van".

¿Cómo hiciste para armar tu cartera de servicios y qué errores cometiste y cómo lo fuiste modificando?

[Juli]
Bueno, pregunta difícil, sobre todo porque, en mi caso al menos, fue medio oferta y demanda de ver que era lo que me pedían, lo que requerían y empezar a delinear o crear un servicio en base a eso.

El primero con el que empecé y que voy a seguir dictando así tenga un equipo de 80 personas, yo voy a seguir haciendo branding, porque amo el branding. Siento que también me conecta un poco con mi parte más creativa, que no quiero dejarla de lado. Más allá de que de que tenga otros roles o no los tenga, voy a seguir haciendo branding porque es algo que me apasiona hacer. Empecé con eso, que decirle branding, de todas maneras, es medio como ponerle un poco de ánimo, porque no era branding cuando empecé. Era, si se quiere, una identidad, vamos a decirle, muy rudimentaria, pero no era branding. Después comprendí la diferencia.

Estudié para poder decir: "Bueno, ahora sí puedo brindar Branding", y después, con el tema de la web, porque justo había hecho también un curso de desarrollo. Sabía que de todas maneras, no quería dedicarme a hacer webs desarrolladas, tipo programación, porque eso es otro mundo muy amplio. Y me di cuenta de lo que valía una web desarrollada a medida. Mis clientes de ese momento, que eran emprendedores que recién empezaban, no podían costear un servicio de esa naturaleza.

Sí me sirvió quizás toda la parte de aprender desarrollo, pero me di cuenta que tenía que ir por alguna plataforma un poco más amigable y accesible por el tipo de cliente que yo tenía en ese momento. Entonces empecé a estudiar WordPress. Y ahí empecé brindando también el servicio de diseño web, que también, obviamente, con todo prueba y error.

Y a medida que me iban pidiendo algunas otras cosas, como por ejemplo, no sé, placas para redes, o toda la parte de imagen del Instagram o de Facebook o lo que fuese, bueno, fui un poco agregando y sacando del servicio de Branding o haciendo un servicio nuevo dedicado exclusivamente, por ejemplo, a las redes.

Y con respecto a hoy en día, tenemos otro tipos de servicios que no tienen que ver con el diseño, como por ejemplo, la parte de asesoría comercial o de legales, que no tiene mucho que ver con con lo que es el diseño en sí, o registro de marca, pero lo fui incorporando por necesidades que veía que tenían mis clientes y que en lugar de decir: "te recomiendo a alguien para que vayas", prefería hacerlo como in-house, teniendo un equipo que yo supiese cómo trabajaba y dándole la atención que el cliente necesitaba. Entonces fue un poco eso, oferta y demanda, y también tener en cuenta que era lo que me gustaba hacer. Cuando era yo sola tenía en cuenta que era lo que me gustaba hacer. Hacer web me gustó, ya no me gusta más. Por eso no las hago más. Las delego. Al principio me gustaba, después me dejó de gustar, y creo que eso también es importante, porque si hacemos un servicio que es superrentable y que tenemos los clientes, pero lo odiamos, vamos a trabajar mal. Entonces, me parece que ahí también lo principal es oferta y demanda y que realmente nos guste hacerlo, porque si no lo vamos a hacer mal.

[Flor]
Bueno, y fuiste agregando servicios, pero ¿dejaste de brindar alguno y por qué?

[Juli]
Sí, dejé brindar uno que era el diseño del feed mensual porque veía que me quedaba un poco corto, porque con el tema de las redes sucede que los clientes siempre van a solicitar más. Si le incluye el diseño del feed, te van a pedir también el diseño de las historias. Si incluye el diseño de las historias y del feed, te van a pedir el diseño de plantillas para cuando vos estés online, ellas pueden hacer algún posteo. Siempre hay algo que no está incluido que te lo piden. Entonces, la realidad es que dije, bueno, teniendo en cuenta todo esto, vamos a hacer un servicio que incluya todo con el precio correspondiente y no me van a pedir más nada. Entonces dejé, por ejemplo, de dar lo que era el diseño de feed, solo diseño mensual, porque era algo que tampoco me era muy rentable porque me llevaba mucho tiempo y prefería hacer todo el paquete más completo. Pero bueno, eso es algo que, como decíamos al principio, es algo que uno va ajustando.

[Anto]
Mencionaste antes el tema de equipo, de delegar y más, ¿Cómo es el camino o qué errores tuviste hasta ahora o que te gustaría mencionar en cuanto a formación de equipo de trabajo?

[Juli]
Creo que lo más importante cuando uno está buscando equipo es, obviamente yo no voy a juzgar si estudiaron o no. Tendría que ser muy hipócrita para pedir un título a las chicas que trabajan conmigo cuando yo no lo tengo. No las busqué por ese lado, sí las que se dedican a lo que es diseño, por supuesto, que tuvieran una estética alineada con lo que yo estoy trabajando y con lo que mis clientes piden, eso sí. O sea, chequear el porfolio más o menos. No me importa dónde ni cómo aprendieron, pero sí que tengan las habilidades para para desarrollar el servicio.

Después, todo lo que es proceso y eso, se puede capacitar, se les puede enseñar. Así que eso no era algo que me molestara tanto, que no tuvieran un proceso de ellas para su propio trabajo, pero sí que tuvieran un estilo similar. Eso es algo que lo vas midiendo un poco. Es medio prueba y error.

Se puede hacer, por ejemplo, una prueba de uno o dos meses para ver cómo se adapta a esa persona a la estructura de trabajo, o sea, sin ningún tipo de contrato ni compromiso, de uno o dos meses, por supuesto, remunerados, pero como para ver cómo se va adaptando a esa persona. Y las personas que trabajan conmigo, que tienen contacto con el cliente, que en realidad son todas, pero las que más tienen contacto, me interesaba que tuviesen experiencia en eso. Que puede ser atención al cliente en otra área, pero sí que tuviesen el carácter, la facultad para manejar al cliente, porque vas a estar teniendo que comunicarle quizás a veces no muy buenas noticias, como por ejemplo, "tenés que pagar un ajuste extra", que obviamente no es una buena noticia para el cliente, entonces tener ya la soltura y la experiencia para poder manejar una situación así. Me fijé mucho en eso, en cómo se expresaba la persona y la experiencia que haya tenido manejando clientes, pero está bueno hacer quizás una prueba de uno o dos meses para ver cómo se va desenvolviendo.


37:37 | Cometer errores a conciencia

[Flor]
¿Cometiste alguna vez algún error de esos que después decís: "¿por qué no lo vi venir?" o "lo tendría que haber visto venir"?, algún error que te haya quedado ahí, porque viste que encima después como son de esos que no previste te quedan picoteando en la cabeza: "¿Por qué no previne esto?".

[Juli]
Sí, me pasó. De vuelta, es mi karma, chicas. Las páginas web son mi karma. Todo lo que me pasó, me pasó con diseño web, es mi karma realmente. Me pasó con una web que sabía cómo era ese cliente porque habíamos trabajado previamente, pero ya habíamos terminado en el trabajo, había sido el año anterior que me había contratado. No había sido un proceso muy fluido que digamos, pero bueno, se había logrado terminar y volvió un año después para contratar la web y había algo adentro mío que me decía "no lo tomes, no lo tomes". Y bueno, por una cuestión de necesidad económica, lo tomé y me arrepentí desde el minuto uno porque nunca respetó el proceso, hubo un montón de cosas.

Yo después de ese cliente, le agregué tres páginas al contrato, tres, porque realmente pasaron tantas cosas que sabía que me iban a pasar pero es como que, bueno, dale, me arriesgué, fui al barro igual y creo que fue el peor error desde el primer momento haber sabido que no íbamos a a congeniar. Y de hecho es un proyecto que no se terminó. O sea, no se logró terminar porque tuve que decirle que no seguía, me pasó eso. Y la realidad es que no es algo de lo que me sienta orgullosa para nada, porque creo que nuestro deber como profesionales es entregar básicamente aquello por lo cual el cliente nos está pagando.

Por supuesto que no me pagó el el restante, el saldo del trabajo, pero lo tuve que finalizar porque era algo que no se iba terminar y claramente hacía caso omiso a mis indicaciones o recomendaciones y no puedo trabajar con una persona así. Por supuesto, no soy una experta total en lo que es diseño web, pero si me estaba contratando es porque tengo conocimiento para poder brindar el servicio y si no escucha lo que yo le digo, qué es lo que le va a convenir o qué es lo que va a ser mejor para que esa página web, por ejemplo, funcione adecuadamente, no vamos a llegar a buen puerto.

[Anto]
El problema es que web es muy amplio y es como un iceberg. O sea, vos ves una cosa, visual, "ah, qué lindo este botón", "ah, en esta página hace esto" y después viene el cliente y dice "yo quiero lo mismo que esta página". Sí, claro. Pero el desarrollo que hay detrás de eso, o a veces simplemente te dicen "Ay, no. Al final este botón que dirija a tal lado". No, no, no es tan fácil. O "Quiero que este botón haga esto", y sí, pero del otro lado implica que entonces, si tenés así de desarrollo -yo tuve varios proyectos así con desarrollo con programadores- es un montón, y el cliente te dice "pero es un botoncito", pero del otro lado implica cinco días de trabajo quizás. O que me cambias algo cuando ya estamos trabajando, son cinco días, cinco días perdidos de trabajo. Es muy difícil y obviamente se entiende, porque el cliente no tiene esa cabeza, pero resulta muy difícil tratar de explicarle al cliente cómo funciona y que a veces eso que está pidiendo, no es de mala gana sino que de verdad no se puede o es imposible a veces hacer o implicaría mucho cambio en la programación. Es muy difícil.

[Juli]
Sí, hacerle entender es complicado porque aparte quizás puede pensar que es por falta de voluntad, y no es así.

[Anto]
Es que es lo primero que uno piensa. En branding es distinto. Creo que la las pocas veces que tuve que decirle que no un cliente en branding, fue más que nada por color, por impresión o porque no podes tener dorado en lo digital o que quieran un degradé después en bordado, esas cosas. Así es más fácil, que la cabeza quizás de una persona entiende y de ponerle ejemplos. En web es muy complejo poder explicarle una programación básica. A mí me cuesta a veces cómo se hace algo. O a veces digo: "¡Ay, sí!" y después resulta que era un chino detrás hacer eso que le dije que sí al cliente. Eso es lo difícil de web, no le tengan idea al servicio de web.


[Juli]
Estamos como satanizando el servicio de diseño web y no.


42:29 | Orgullosas de cometer errores

[Anto]
Con la pregunta que te hizo flor, bueno, acá somos muy pro errores. Para mí, es como que cada gran crecimiento que veo, que tuve, es porque hubo un gran error detrás. ¿Hay algún error del que te sientas orgullosa?

[Juli]
Sí, el último, más grande, que fue que iba a lanzar una formación para diseñadores específicamente y no la lancé. Di marcha atrás por un tema del burnout que les comenté que tuve y prioricé mi salud mental, y tuve que parar todo. Eso incluía a los proyectos y también incluía los lanzamientos que tenía ya desarrollados. Ya tenía armada la clase, la estructura, todo, pero no estaba en condiciones de poder brindarla, no iba a dar lo mejor de mí. Y creo que obviamente fue un error porque ya había comunicado en las redes que iba a haber una formación y que después no hubo, y de hecho tuve gente que se anotó, que pagó su ticket y obviamente tuve que hacer un reembolso de dinero porque no la iba a poder dictar, y creo que el error ahí fue haberme precipitado un poco.

En realidad fue creerme, o sea, ser positiva, decir, "voy a llegar bien con todo" y no, no llegué bien con todo. Fui poco realista de decir "bueno, estoy manejando cuatro webs, tres proyectos de branding y además, haciendo una clase". Y además, haciendo la landing de venta y configurando todo para poder venderla y después dictarla y después hacer seguimiento. No, señora, no va a llegar. Entonces, creo que fui demasiado positiva en creer que sí. Y me pasó eso de tener el burnout, que fue por un problema, en realidad, de salud, que me explotó la cabeza literal y tuve que parar y no la pude dictar a la formación, pero me siento orgullosa de haberme escuchado porque realmente no podía. No podía seguir. Y creo que inclusive la gente que se anotó y a la que le expliqué la situación y le hice el reembolso de dinero me terminó agradeciendo que no haya dictado la clase en esas condiciones porque realmente no iba a poder dar lo mejor de mí misma.

[Flor]
Sí, bueno, no la diste pero tal vez la harás más adelante o cuando creas conveniente o si no, nada, sacaste este aprendizaje, ¿no? Es un poco lo que venimos hablando en los últimos episodios, que está bueno eso, poder compartir también nuestros errores y al final no pasó nada, porque tuviste una devolución positiva sobre ese error porque lo pudiste blanquear y no tuviste que llegar al límite. Por ahí, te hubiese venido mucho peor tener que dictar esa clase y lo hubieses preparado tal vez, pero no de la mejor manera y mejor guardarse, y tal vez para otro momento funcione mejor.


45:17 | Los errores y el aprendizaje

[Flor]
Mirando hacia atrás en tu recorrido como diseñadora y también como dueña de tu propio negocio, siempre hablas mucho del tema de los negocios, ¿Hay algo que te hubiese gustado saber antes de comenzar?

[Juli]
Sí, me hubiese gustado estudiar administración de empresas, chicas. Esa es la realidad.

[Flor]
No diseño, administración de empresas.

[Juli]
La realidad es que hoy tengo una visión que me está costando por un montón de cuestiones, porque quizás hay que terminar de definir bien el tipo de público, por el contexto económico del país, por un montón de cuestiones, y el emprender y la vida misma, porque esto es medio tropezar y seguir, tropezar y seguir. Y me parece que, hoy en día más allá de seguir haciendo diseño, de tener proyectos de branding y todo, hay un rol que es el de dirigir un negocio que no nos enseñan a nadie. Y creo que esto pasa en todas las carreras, no solo en diseño, porque no te dan los conocimientos que se requiere para vos fundar un negocio con gente trabajando, todo, y que ese negocio sea rentable y exitoso.

Entonces, me pasó hoy en día de verme en una situación de, por ejemplo, de tener que tener conocimiento sobre finanzas, sobre rentabilidad, sobre legales, sobre un montón de otras aristas o mismo de administrar una empresa de manera exitosa y rentable, y darme la cabeza contra la pared porque son conocimientos que no tengo porque no los estudié, porque no me los enseñaron. Y obviamente tengo que aprenderlos por mi cuenta, pero si yo hubiese venido ya con ese conocimiento, quizás hoy estaría en otra situación o me hubiese llevado el camino del crecimiento un poco menos. Pero creo que eso es la situación que veo hoy en día. No quiere decir que no se pueda, sino que va a llevar un poco más de tiempo porque son cosas que tengo que ir aprendiendo.

[Flor]
Bueno, hablando de todos estos errores y demás, ¿Cuáles son los aprendizajes más grandes que te llevas de este recorrido?

[Juli]
Lo más importante, tener procesos, tener estructuras, poner límites, no tener miedo a poner límites. No tener miedo a incrementar los precios cuando se corresponda, cuando uno se haya formado, cuando un haya invertido, cuando veas que tu servicio creció en lo que sea que lo hayas mejorado y que realmente valga ese incremento de precio o que tengas tanta demanda de gente que quiere trabajar con vos que tenés que subir los precios sí o sí.

Eso me parece lo más importante, no tener miedo a tomar decisiones o si querés hacer equipo. Que ese miedo de incorporar a una persona no te frene por el hecho de que nadie pueda hacer el servicio igual que vos o de perder rentabilidad porque vas a incorporar a alguien al equipo pero lo vas a ganar en tiempo, lo vas a ganar en salud mental. Vas a poder, quizás, elegir formarte o invertir en otras cosas o capitalizar tu tiempo en otras cosas. Entonces me parece que el miedo a veces es un gran detractor de la toma de decisiones. Y sobre todo, como en mi caso, que tuve que aprender por otros lados porque no tenía el conocimiento, si me hubiese dejado invalidar por el miedo, creo que no estaría hoy en día teniendo el negocio ni la visión a la que quiero llegar. Entonces me parece que ese es el mejor consejo que puedo dar: no permitir que el miedo te invalide en la toma de decisiones.

Como dice mi mamá: "no hay que preocuparse, hay que ocuparse". Si tenés una dificultad, formate, estudiá, aprendé, pedí ayuda, pedí opinión, hacé networking, juntate con otros colegas, tipo mastermind, que eso ayuda también un montón. Y hay que ocuparse, creo que eso es lo principal que puedo decir.

[Flor]
Me parece genial cerrar todo esto. Hablamos mucho de errores, pero hay mucho de aprendizaje justamente con esos errores. Y por eso queríamos hablar de este tema en particular.

[Anto]
Comparto un montón los aprendizajes. Fuiste mencionando lo que te fue pasando o errores que cometiste o estos aprendizajes y al final, todos los diseñadores por cuenta propia terminamos casi viviendo lo mismo, y qué bueno que ahora podemos hablarlo. Creo que en algún momento era raro preguntar y ahora ya se habla mucho más y sentirse que todos estamos, en definitiva, pasando por lo mismo, y podemos preguntar "¿Cómo pasaste esto?", "¿qué te pasó?".

Ahora cuando mencionas lo de delegar, ojalá alguien hubiera venido y me hubiera dicho: "delegá antes, no tengas miedo". Todo lo que vos dijiste me pasó igual. O sea, ojalá me hubiera animado mucho tiempo antes y no hubiera dilatado tanto eso. Me encantan todos los temas que mencionamos hoy.


50:30 | Diseñar en comunidad

[Flor]
Bueno, si Juli quiere agregar algo...

[Juli]
La verdad que estoy más que agradecida de que me hayan invitado a este espacio, como siempre. Siempre les voy a decir que sí, chicas.

[Flor]
Tiene el sí fácil Juli.

[Juli]
Sí, sí, estoy más que agradecida porque aparte me parece que también visibilizar un poco estos temas, bueno, es lo que decía Anto. Cuando ustedes arrancaron y yo empecé un poco después, pero me pasaba lo mismo. No tenía lugares donde pudiese consultar este tipo de dudas, por eso es como que era un poco a los ponchazos, era caerte y aprender de eso solo. Pero hoy en día tener espacios para poder conversar con otros colegas, equipos de mastermind que vos puedas hacer, consultar dudas o inclusive contratar a un mentor. Pero cuando yo arranqué tampoco existía esa opción de contratar a un mentor pago, no había mentores pagos. Y hoy en día podés pagarle a alguien que realmente te mire la foto de tu negocio y te diga "tenés que hacer esto, esto y esto". Y eso no existía, y no hasta hace muchos daño atrás. Entonces, creo que también hay que aprovechar todas esas herramientas y estos espacios gratuitos que hoy en día tenemos.

[Flor]
Para cerrar, queremos agradecer a Juli por haberse sumado y por su buena predisposición de siempre y si se quedaron con ganas de escucharla un poco más, Juli acaba de lanzar un pódcast, Empresarias en Acción, para mujeres que tienen su propio negocio o quieren crear uno. Si les ha gustado la entrevista, les gustaría que entrevistemos a alguien, pueden escribirnos por Instagram a @detrasdel.diseno. Nos encontramos en unas semanas en el próximo episodio de Detrás del Diseño.


¿TE HA GUSTADO EL EPISODIO O TE GUSTARÍA ESCUCHARLO LUEGO? GUÁRDALO EN PINTEREST


Detrás del Diseño es el espacio donde conversamos de todo aquello que sucede detrás de la pantalla para inspirar a diseñadores y creativos a construir y desarrollar sus negocios con confianza y claridad, porque creemos que las mentes creativas se potencian.

Sabemos que la pasión no es suficiente para tener éxito en el mundo del diseño y que el camino de crear tu propio negocio puede ser solitario y agotador.

Somos Anto Vico (@steptosquare) y Flor Godoy (@florenciagodoy.dg): diseñadoras, madres y dueñas de negocios creativos.

Síguenos en Instagram, @detrasdel.diseno, para unirte a la conversación. ¡Queremos conocerte!

Anterior
Anterior

EPISODIO #005. TU TRABAJO TIENE VALOR SI TÚ SE LO DAS

Siguiente
Siguiente

EPISODIO #003. LA LIBERTAD DE DEFINIR TU PROPIO ÉXITO